La terapia nutricional es necesaria para prevenir o tratar la malnutrición del paciente, lo cual se traduce en menor riesgo de complicaciones y un resultado clínico favorable.
Algunos factores que favorecen la aparición de desnutrición en los pacientes que padecen alguna enfermedad ya sea en casa o en hospital, son los siguientes:
- Menor consumo de alimentos por náusea, problemas para tragar alimentos, falta de apetito, cambio en la percepción de sabores o efectos secundario de fármacos.
- Requerimientos nutricionales aumentados por la misma enfermedad.
- Alteraciones en el sistema digestivo que no permiten una adecuada digestión y/o absorción de nutrimentos.
- Perdidas aumentadas de nutrimentos por heridas o fugas intestinales.
Una alimentación deficiente no solo decrementa el peso de la persona, también:
- Prolonga el tiempo de cicatrización de las heridas.
- Provoca debilidad muscular.
- Aumenta el riesgo de falla respiratoria.
- Aumenta el riesgo de complicaciones infecciosas.